miércoles, 24 de octubre de 2012

[Sexear] La odisea del implante anticonceptivo


@ItzelEguiluz

Hoy es mi último día completo en México y no ha sido divertido en cuestión de derechos reproductivos. Esta columna será una queja totalmente personal hacía los servicios de salud que se ofrecen en el país y es que pareciera que la Norma Oficial sobre planificación familiar no existiera. Les cuento mi odisea de los últimos días:

Todo comenzó hace unas semanas cuando platicando con Carlos (alías con quien me casé) decidí que quería volver a utilizar el implante subdérmico anticonceptivo. Ya lo había utilizado hace un tiempo y creo que al menos para mí es el mejor método anticonceptivo en el mercado: no se te puede olvidar, es fácil de utilizar, dura aproximadamente tres años (aunque los hay de cinco), hay rápida recuperación de la fertilidad, y es lo más seguro que existe con un 99% de eficacia, siempre y cuando lo inserte un profesional (si no tienes una pareja estable no dejes de usar condón). Además yo veo como una ventaja uno de sus efectos, para otras mujeres no lo es, que “no te baja” durante largos periodos, prácticamente durante los primeros dos años (aunque esto no siempre pasa).

Estaba en Querétaro y decidí darle uso a los servicios de planificación familiar, así que llamé a Planificatel y ahí pregunté a dónde podía acudir. La chica que me atendió me proporcionó dirección y teléfono de dos centros de salud de la Secretaría de Salud a donde podía acudir, me quedaban muy cerca. Llamé y me dijeron amablemente que acudiera al segundo día de mi periodo y en qué horario ¡maravilloso! Pensé que todo funcionaba de acuerdo a lo planeado. Sin embargo no pude acudir porque el implante se inserta en el brazo y deja una marca, como mi piel es muy delicada no quise arriesgarme a ir a una boda al siguiente día con mi minishow. Pensé que si ya había sido así de sencillo no tendría mayor problema en volver a casa de mis papás (zona Satélite del Estado de México) y hacer lo mismo.

Grave error cometí al no ir en el momento indicado. Ayer pasé más de tres horas al teléfono con diferentes instancias de salud y al momento de escribir esta columna (tarde para tratar de tener más información) no lo he logrado conseguir. La Norma Oficial Mexicana de planificación familiar, entre otra información valiosa, dice:

 “…se pondrá al alcance de toda la población información veraz y oportuna, orientación y consejería con calidad y calidez, así como los métodos y estrategias anticonceptivas que respondan a las necesidades de cada individuo y de cada pareja, de acuerdo a las diferentes etapas del ciclo reproductivo. Se debe de ofertar una diversidad de métodos anticonceptivos, desde los naturales hasta aquellos que sean producto de los avances científicos y tecnológicos recientes, que hayan demostrado ser efectivos y seguros.”

En teoría los servicios de salud reproductiva se ofrecen en todo el sistema público de salud del país a cualquiera que los solicite. Pero ¡oh sorpresa!, que ni teniendo la información pude exigir este derecho. Llamé a Planificatel, para empezar en varios kilómetros a la redonda no hay un centro de salud; aun así me proporcionaron algunos datos y me dijeron que podía acudir a cualquier Unidad Médico Famliar del IMSS, en caso de no encontrar el implante o clínica cercana.

Llamé a dos Unidades del IMSS y en las dos, una desde la dirección, me dijeron que como tienen pocas unidades de ese método es sólo para sus derechohabientes, lo que me parece una violación directa a mis derechos reproductivos. Llamé a Planificatel nuevamente y no había forma de quejarme, “sólo con el director de la unidad”, casualmente quien me negó el servicio. Las clínicas fueron la 51 y la 61 del IMSS en el Estado de México.

Eso no fue todo, también está otra parte muy triste. Busqué centros de salud en el Estado de México, aunque me quedaran lejos, y me detuve cuando en el Centro de Salud de la Col. Higuera pregunté: “Disculpe, quería saber si tenía disponible el implante sudérmico” “¿El qué!”. Ante respuesta como esa decidí cambiar mi ruta al D.F. La única clínica que me queda a menos de 35 minutos de mi casa es el Centro de Salud México España en donde al preguntar fácilmente me dijeron “no lo tenemos y no sabemos para cuándo”.

Antes de cerrar la columna con mis quejas debo decir que acabo de comunicarme a una clínica del ISSSTE en Lomas Verdes, Estado de México, en donde me dijeron que sí podían aplicarlo, sacando cita antes de las 7am de cada día, pero que esta semana sería hasta el viernes… Gracias, yo me voy mañana.

Así que dejo mi enorme queja para el IMSS que no respeta los derechos reproductivos de las mujeres de este país. No es posible que queramos promover el uso de los métodos anticonceptivos, que haya menos embarazos no planeados y menos abortos, cuando no se brindan los métodos aunque los haya.

Publicado originalmente en Djovenes.org

martes, 16 de octubre de 2012

[Sexear] Sexo oral: ¿Que me tengo que cuidar?


@ItzelEguiluz

Mi tesis doctoral es en muy pocas palabras sobre sexualidad, reproducción y migrantes. En otras palabras sobre migrantes jóvenes latinos en Madrid. Para poder hacer una tesis como la mía necesito entrevistar a migrantes y que me cuenten sus historias. Me gusta escucharlos.

Pensando en mi columna de hoy me encontré con un tema que no deja de aparecer en mis entrevistas cuando llegamos al punto de hablar sobre sexo oral: protegerse ante infecciones de transmisión sexual (ITS). Al parecer a algunos pocos les pasa por la mente, otros nunca lo habían pensado y ni hablar de alguno que diga que ha utilizado protección. Así que hablemos de sexo oral y sus riesgos y sobre todo cómo evitarlos.

Herpes, VIH / Sida, VPH (virus del papiloma humano) y gonorrea son algunas de las infecciones que pueden transmitirse mediante la práctica del sexo oral. Aunque la transmisión depende de muchas causas, como nuestro sexo o salud bucal, puede reducirse si usamos protección: condones o láminas de látex, por ejemplo. Todos debemos protegernos hetero y homosexuales, es decir, no importa si el sexo es hombre-mujer, mujer-mujer u hombre-hombre.

Utilizar condón es el caso más fácil de explicar, por eso hay condones de sabores ¿o creían que teníamos sentido del gusto en otra parte del cuerpo? Algunas compañías fabrican condones especiales para sexo oral, que por sus características no son recomendables para la penetración.

En cualquier otro caso utilizar láminas de látex. ¿Láminas de látex? Sí, existen unos cuadros de látex (también llamados protectores dentales) que se venden básicamente en sex shops o en condonerías. Aunque su uso no es común y sí desconocido, todos deberíamos conocerlas y saber en dónde adquirirlas. Deberían, en mi opinión, estar accesibles en cada farmacia y supermercado al lado de los condones, que a su vez no deberíamos tener que pedir en un mostrador.

Por cierto, justificar no cuidarnos, en cualquier tipo de práctica, por las siguientes razones no vale: “se ve sano”; “tiene buena reputación”; “parece que no se mete con muchas”; “es niña bien”; “es niño de familia”; “dice que siempre se ha cuidado”; etc.

Recuerden que la “fidelidad adolescente” (término que parece sólo uso yo) no existe. Fidelidad adolescente es cuando todos somos muy fieles a nuestras parejas, pero generalmente cuando somos jóvenes tenemos una, dos, tres, o más parejas en poco tiempo. Tenemos una pareja y le somos fieles, terminamos con esa pareja, pasan seis meses y tenemos otra, y así sucesivamente… Así que, por más fieles que seamos todos, mejor siempre cuidarse.

Realizado para Djóvenes.org

martes, 9 de octubre de 2012

[Sexear] Migración, sexualidad y derechos humanos: el padre Solalinde


@ItzelEguiluz

Para vivir, hablar, investigar o escribir de sexualidad hay vertientes para todos los gustos, géneros, culturas y grupos, entre cientos de opciones. No siempre todas son positivas, y menos aún cuando nos referimos a los grupos colectivos llamados vulnerables. Alguien vulnerable es aquel que nace, vive o se desarrolla en medios que no son los más aptos ni lo más seguros para tener una vida de calidad. Según el Plan Nacional de Desarrollo la vulnerabilidad es “una acumulación de desventajas y una mayor posibilidad de presentar un daño, derivado de un conjunto de causas sociales  y de algunas características personales y/o culturales”.

Dentro de los grupos vulnerables podemos mencionar mujeres, homosexuales, indígenas, transexuales y a los migrantes. Migrantes hay de muchos tipos: con documentos y sin ellos, locales e internacionales, de retorno o con migración circular, niños o adultos o jóvenes.

¿Qué tienen que ver los migrantes con la sexualidad? Hace ya muchos años que se  comenzaron a realizar investigaciones científicas para estudiar el posible riesgo que tenían los migrantes sobre su salud sexual. Hay estudios donde se habla de que los migrantes mexicanos en Estados Unidos tienen comportamientos de riesgo como sexo comercial o uso de drogas inyectables. La mayoría de los migrantes mexicanos a Estados Unidos son jóvenes de entre 20 y 29 años, según la Encuesta sobre Migración en la Frontera norte de México.

Uno de los mayores problemas de un migrante es el viaje. ¿Conoces estos viajes? ¿Alguna vez has pensado cómo es que logran recorrer miles de  kilómetros sin dinero?  Los migrantes mexicanos y centroamericanos viven verdaderas odiseas y sacrificios para cruzar México y de ahí la frontera, el desierto o el río. Los migrantes, muchos de ellos, viven violencia sexual en su camino. Sólo en 2011 la Comisión Nacional de los Derechos Humanos atendió alrededor de 67 mil migrantes.

A lo largo de nuestro país existen algunas “Casas del Migrante” pequeños espacios en lugares cercanos al paso de migrantes. Hay casas del migrante en Chiapas, en el Estado de México o en San Luís Potosí, entre otras. Una de las casas que está en Ixtepec, Oaxaca, fue noticia hace unas semanas, y es que su director Alejandro Solalinde ha tenido que salir de nuestro país por las amenazas en su contra. El padre Solalinde fundó el albergue oaxaqueño en el año 2007; hay noches en las que hasta 400 migrantes intentan dormir en él y recuperar fuerzas para continuar su viaje.

Hay migrantes que caminan cientos de kilómetros, que son asaltados, que pierden contacto con sus familias, que son violados, agredidos y que muchas veces no llegan a su destino. Estos migrantes no migran por gusto, lo hacen por la necesidad de buscar algo mejor, aunque no siempre tengan la suerte de encontrarlo.

Los migrantes necesitan todo el apoyo posible durante su viaje, no se diga durante su estancia en otros países. Me parece inadmisible que la respuesta a los problemas sea la salida del país de aquellos pocos a quienes importan y no la búsqueda de una solución.

miércoles, 3 de octubre de 2012

[Sexear] Tocar o tocar: prevenir el cáncer de mama


¿Sabías que hay mujeres menores de 30 años que viven con cáncer de mama? El cáncer de mama (CaMa) se ha mantenido durante más de diez años entre la primera y la segunda causa de muerte de mujeres mexicanas mayores de 25 años y, a pesar de ser una de las enfermedades más frecuentes en la mujer, lleva consigo muchos tabús. 

Lo primero es dejar claro que un diagnóstico de cáncer no es sinónimo de “me voy a morir”. Lo segundo que no sólo les pasa a las mujeres, aunque el número es mínimo, también llega se a detectar en hombres. Lo más importante es detectarlo a tiempo, detectarlo tempranamente. Lo más importante es conocer nuestros cuerpos, conocer el de sus parejas.

Aunque número de mujeres que desarrolla CaMa antes de los 40 años es bajo, debemos acostumbrarnos a prevenirlo desde los 20 años. Para ello existen diferentes herramientas: revisión que cada mujer debe hacer mensualmente (aunque revisarse en cualquier etapa del mes es útil); revisión por parte del médico o enfermera capacitada; ecografía de la mama (comúnmente conocido como ultrasonido) y/o la mastografía (estudio de radiología para detectar el cáncer de mama).

Sobre la mastografía, en pocas palabras, es el estudio radiológico, rayos X, para la detección del cáncer de mama. Generalmente se utiliza en mujeres mayores de 40 años, dependiendo de las características de cada mujer. Las últimas tecnologías que la acompañan son: la utilización de la tomosíntesis, una técnica que permite observar 50 planos de la mama y la resonancia magnética. Aclaro que las mastografías NO causan cáncer de tiroides, es un mito que sólo retrasa los diagnósticos oportunos.

El año pasado se modificó, en México, la norma oficial mexicana (NOM 041) que indica la edad recomendada, por los servicios sanitarios, para realizar mastografías. Ahora deben realizarse a partir de los 40 años de edad. El cambio se debió a la incidencia (número de casos nuevos de una enfermedad en una población determinada y en un periodo determinado) del CaMa en mujeres jóvenes. Una de las principales impulsoras fue la Dra. Felicia Knaul, Secretaria Ejecutiva de la asociación ‘Tómatelo a Pecho’ y Directora del HGEI de la Universidad de Harvard, a quien le detectaron CaMa a los 40 años de edad.

El ultrasonido mamario se realiza generalmente como complemento a la mastografía, en mujeres embarazadas o amamantando y en mujeres menores de 40 años. Se realiza cuando la autoexploración no nos permite hacernos una idea clara del estado de salud del seno (ej. Porque la mama es muy densa) o cuando se requiere realizar un estudio más amplio.

Hablando de mujeres menores de 30 años tenemos dos diferentes recomendaciones:

Todas las mujeres con más de 20 años debemos revisar nuestros senos cada mes. Todas, todos los meses. Hay guías que lo recomiendan desde la primera menstruación, como el “Manual de exploración clínica de mamas” de la Secretaría de Salud. Cada mes unos días después de tener la regla (entre el 7 y el 10) debemos autoexplorarnos (nombre técnico para revisar nuestros senos). Existen muchas guías de cómo realizar una autoexploración en la red, pero básicamente debemos realizar lo siguiente:

Dos posiciones: acostadas con un brazo detrás de la nuca y de pie frente al espejo, también con el brazo detrás de la nuca; con el brazo izquierdo se revisa el seno derecho y viceversa, tocamos en círculos, como un espiral, toda el área del seno, presionando levemente en búsqueda de “bolitas”, también debemos revisar la zona de las axilas.

Al principio será complicado, pero la idea es que vayas conociendo tu cuerpo para encontrar posibles cambios, hundimientos, enrojecimientos, crecimientos, cualquier cosa que no haya estado ahí antes.

Si tienes 25 años o más, además de autoexplorarte, debes acudir a revisión médica cada año. El médico, o personal capacitado, hará una revisión similar a la autoexploración, generalmente con la presencia de una enfermera.

Aunque a veces es difícil para algunas mujeres conocer sus propios cuerpos o acudir al médico a revisión debemos estar conscientes de que es por nuestra salud y que el médico (hombre o mujer) es un profesional. Si tienes dudas siempre pregunta, por más sencillo que sea; si te sientes incómoda hazlo saber, nunca te quedes callada; si no te convencen los resultados acude a otro médico o servicio de salud. Recuerda que la consulta es confidencial.

El cáncer de mama tiene muchas más probabilidades de sobrevivencia entre más pronto se detecte. Las recomendaciones para evitar ésta y otras enfermedades son: hacer al menos 120 minutos de ejercicio a la semana; comer menos grasa, tomar más agua; y comer frutas y verduras todos los días. 

Otros puntos que debes considerar es que existen factores de riesgo como tener antecedentes en tu familia. Estos antecedentes son en línea directa: mamá, papá o abuela, por ejemplo. También tomar en cuenta que entre más edad hay más probabilidad de tener CaMa. Las mujeres sin hijos o que no han amamantado y son mayores de 30 años, las que tienen obesidad, o  las que consumen mucho alcohol también tienen mayor riesgo.

Recuerda tener un factor de riesgo no significa que necesariamente vayas a tener la enfermedad, pero sí que debes cambiar tus hábitos o que debes poner mayor atención a los cambios de tu cuerpo.

¿A qué me refiero con todo lo anterior? A prevenir. La realidad es que sí pasa. La realidad es que podemos hacer mucho para que no pase.

Nota:


*Realizado orginalmente para Djovenes.org