@ItzelEguiluz
Hoy
es mi último día completo en México y no ha sido divertido en cuestión de
derechos reproductivos. Esta columna será una queja totalmente personal hacía
los servicios de salud que se ofrecen en el país y es que pareciera que la
Norma Oficial sobre planificación familiar no existiera. Les cuento mi odisea
de los últimos días:
Todo
comenzó hace unas semanas cuando platicando con Carlos (alías con quien me
casé) decidí que quería volver a utilizar el implante subdérmico
anticonceptivo. Ya lo había utilizado hace un tiempo y creo que al menos para
mí es el mejor método anticonceptivo en el mercado: no se te puede olvidar, es
fácil de utilizar, dura aproximadamente tres años (aunque los hay de cinco),
hay rápida recuperación de la fertilidad, y es lo más seguro que existe con un
99% de eficacia, siempre y cuando lo inserte un profesional (si no tienes una
pareja estable no dejes de usar condón). Además yo veo como una ventaja uno de
sus efectos, para otras mujeres no lo es, que “no te baja” durante largos
periodos, prácticamente durante los primeros dos años (aunque esto no siempre
pasa).
Estaba
en Querétaro y decidí darle uso a los servicios de planificación familiar, así
que llamé a Planificatel y ahí pregunté a dónde podía acudir. La chica que me
atendió me proporcionó dirección y teléfono de dos centros de salud de la
Secretaría de Salud a donde podía acudir, me quedaban muy cerca. Llamé y me
dijeron amablemente que acudiera al segundo día de mi periodo y en qué horario
¡maravilloso! Pensé que todo funcionaba de acuerdo a lo planeado. Sin embargo
no pude acudir porque el implante se inserta en el brazo y deja una marca, como
mi piel es muy delicada no quise arriesgarme a ir a una boda al siguiente día
con mi minishow. Pensé que si ya
había sido así de sencillo no tendría mayor problema en volver a casa de mis
papás (zona Satélite del Estado de México) y hacer lo mismo.
Grave
error cometí al no ir en el momento indicado. Ayer pasé más de tres horas al
teléfono con diferentes instancias de salud y al momento de escribir esta
columna (tarde para tratar de tener más información) no lo he logrado
conseguir. La Norma Oficial Mexicana de planificación familiar, entre otra
información valiosa, dice:
“…se pondrá al alcance de toda la población información veraz
y oportuna, orientación y consejería con calidad y calidez, así como los
métodos y estrategias anticonceptivas que respondan a las necesidades de cada
individuo y de cada pareja, de acuerdo a las diferentes etapas del ciclo
reproductivo. Se debe de ofertar una diversidad de métodos anticonceptivos,
desde los naturales hasta aquellos que sean producto de los avances científicos
y tecnológicos recientes, que hayan demostrado ser efectivos y seguros.”
En teoría los servicios de salud reproductiva se ofrecen en todo
el sistema público de salud del país a cualquiera que los solicite. Pero ¡oh sorpresa!,
que ni teniendo la información pude exigir este derecho. Llamé a Planificatel,
para empezar en varios kilómetros a la redonda no hay un centro de salud; aun
así me proporcionaron algunos datos y me dijeron que podía acudir a cualquier
Unidad Médico Famliar del IMSS, en caso de no encontrar el implante o clínica
cercana.
Llamé a dos Unidades del IMSS y en las dos, una desde la dirección,
me dijeron que como tienen pocas unidades de ese método es sólo para sus
derechohabientes, lo que me parece una violación directa a mis derechos
reproductivos. Llamé a Planificatel nuevamente y no había forma de quejarme,
“sólo con el director de la unidad”, casualmente quien me negó el servicio. Las
clínicas fueron la 51 y la 61 del IMSS en el Estado de México.
Eso no fue todo, también está otra parte muy triste. Busqué
centros de salud en el Estado de México, aunque me quedaran lejos, y me detuve
cuando en el Centro de Salud de la Col. Higuera pregunté: “Disculpe, quería
saber si tenía disponible el implante sudérmico” “¿El qué!”. Ante respuesta
como esa decidí cambiar mi ruta al D.F. La única clínica que me queda a menos
de 35 minutos de mi casa es el Centro de Salud México España en donde al
preguntar fácilmente me dijeron “no lo tenemos y no sabemos para cuándo”.
Antes de cerrar la columna con mis quejas debo decir que acabo de
comunicarme a una clínica del ISSSTE en Lomas Verdes, Estado de México, en
donde me dijeron que sí podían aplicarlo, sacando cita antes de las 7am de cada
día, pero que esta semana sería hasta el viernes… Gracias, yo me voy mañana.
Así que dejo mi enorme queja para el IMSS que no respeta los
derechos reproductivos de las mujeres de este país. No es posible que queramos
promover el uso de los métodos anticonceptivos, que haya menos embarazos no
planeados y menos abortos, cuando no se brindan los métodos aunque los haya.
Publicado originalmente en Djovenes.org